El tratamiento térmico es un proceso fundamental realizado en los aceros para mejorar sus propiedades mecánicas, como la tenacidad, resistencia al desgaste y maquinabilidad. Mediante ciclos de calentamiento y enfriamiento controlados, logramos una microestructura óptima y una superficie brillante, libre de oxidación o descarburación. Nuestro enfoque se basa en un estricto control de la temperatura durante la austenización, templado y revenido. Además, nuestra operación de horno está completamente automatizada, y todos los parámetros del proceso se documentan meticulosamente para garantizar la calidad y la verificación. Confíe en nuestro expertise en tratamientos térmicos para mejorar el rendimiento y la durabilidad de sus aceros.
Temple
Temple: es una técnica de tratamiento térmico que implica calentar y enfriar rápidamente un material para mejorar sus propiedades mecánicas, proporcionando una mayor resistencia y dureza.
Revenido
Revenido: equilibra la dureza y la tenacidad del material, reduciendo la fragilidad y mejorando su resistencia. Ayuda a obtener materiales más duraderos y menos propensos a la fractura.
Normalizado
Normalizado: el material se calienta por encima de su temperatura de transformación y luego se enfría lentamente en el aire. Este proceso tiene como objetivo reducir las tensiones internas y mejorar la homogeneidad del material.
Alivio de Tensiones
Temple: es una técnica de tratamiento térmico que implica calentar y enfriar rápidamente un material para mejorar sus propiedades mecánicas, proporcionando una mayor resistencia y dureza.
Recocido
Revenido: equilibra la dureza y la tenacidad del material, reduciendo la fragilidad y mejorando su resistencia. Ayuda a obtener materiales más duraderos y menos propensos a la fractura.
Tenifer y QPQ
Normalizado: el material se calienta por encima de su temperatura de transformación y luego se enfría lentamente en el aire. Este proceso tiene como objetivo reducir las tensiones internas y mejorar la homogeneidad del material.
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